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martes, marzo 16, 2010

CUANDO PIENSO

Cuando paso dos semanas pensando en ti me preocupo. Me pregunto por qué será, qué estoy haciendo, qué me está pasando. No es por nada. Es sólo eso. Sé que luego se me pasa. Y que todo es igual. Que vuelvo a emborracharme y a mirar a mujeres mal vestidas, peor maquilladas, pero que me ponen. Mujeres que tal vez no saben sumar. Mujeres que no son demasiado listas.

Cuando paso dos semanas pensando en ti me preocupo. No por ti. Es por mí. Me preocupo por lo que pueda pasarme. ¿Y si me da una embolia? A mí pensar no se me da bien, y si me preocupo mucho a lo mejor empieza a sangrarme el cerebro. ¿Y si de repente me gusta pensar? Me asusta ser uno de esos que llevan gafas y saben decir inhibiciones. No quiero ser así. Y para eso lo mejor es no pensar.

Cuando paso dos semanas pensando en ti me preocupo y toco la guitarra a todas horas como si fuera un cantautor, un poeta o un amante cortés. Mis vecinos me quieren matar. Y los pájaros se van del edificio porque no pueden, los pobres, dormir. Felipe dice que también es porque canto horriblemente mal.

Cuando paso dos semanas pensando en ti me preocupo. Así que hago lo que haga falta. Me emborracho de la mejor manera que puedo. O de la peor. Me emborracho hasta que me caigo al suelo. O más aún. O pago a señoritas. De esas que fuman. Ya sabéis a qué me refiero, ¿no? Todo para olvidar que pienso en ti.

Cuando paso dos semanas pensando en ti me preocupo. Porque soy feliz pensando. Y contra eso no tengo nada. Sólo mis chistes. Pero de mis chistes no se ríe nadie.


Así me voy a quedar

1 comentario:

Max dijo...

muy bueno, felicitaciones!
pasa http://www.relatosdeundesquiciado.blogspot.com/